Actualmente el calzado deportivo no sólo se utiliza en el ámbito para el que fue creado, el del deporte, sino que su uso se ha extendido de tal forma que es difícil encontrar personas que, hoy por hoy, no tengan un par de zapatillas en casa y las empleen de forma más o menos habitual, pese a que los ortopedistas no recomienden este uso tan continuado. Pero, ¿cuál es su origen?
Lo más parecido a lo que puede ser una zapatilla de deporte hoy en día habría que buscarlo a finales del siglo XVIII en los talleres de los fabricantes de caucho. Los excedentes de este producto, que se empleaba para hacer ruedas de bicicletas y, posteriormente, de coches, se reutilizaban para distintos productos.
En Inglaterra, las primeras zapatillas se llamaron plimsolls y estaban hechas con lona y una suela de goma. Mientras que en Estados Unidos, la U.S. Rubber Company ideó otras más prácticas y cómodas que recibieron el nombre de sneakers, una abreviatura de "sneak up on someone", es decir, "acercarse sigilosamente". Su suela, tan "sigilosa", estaba fabricada con el caucho vulcanizado que la marca Good Year patentó en 1839.
No obstante, el primer calzado deportivo creado realmente con el fin de ser usado para realizar deporte fueron unos zapatos que la New Liverpool Rubber Company creó en torno a 1880 para jugar al croquet. Y, a partir de entonces, comenzó su fabricación masiva, que llegó al culmen cuando Marques Converse, fundador de la Converse Rubber Shoe Company, creó, en torno a 1920, las aún vivas Converse All Stars para jugar al baloncesto.
La década de los 50 del siglo pasado fue clave para que las zapatillas entraran a formar parte de la cultura popular a través de los jóvenes y adolescentes. Eran baratas, cómodas, duraderas y, según su diseño, triunfaban entre los chicos y chicas y servían, incluso, para definir el carácter o estatus social.
Desde esa época, la evolución, tanto de los diseños como de los materiales y tejidos con las que se han ido fabricando, ha sido lo que ha marcado su presencia permanente en el mercado y su éxito absoluto en todos los ámbitos, no sólo en el deportivo.
Foto: Calzados Pradillo